En este momento, la sociedad está viviendo cambios extraordinariamente rápidos. Durante el siglo XX se desarrollaron las telecomunicaciones y las computadoras. Tal parece que así como en el siglo XVIII, con las máquinas de vapor y los motores, se produjo la Revolución Industrial, ahora estamos viviendo la Revolución de la Informática. Durante la época de las sociedades agrícolas, los cambios sociales tomaban decenas o cientos de años. Durante la era industrial, esos cambios ocurrían en unos cuantos años. Pero en la era de la Informática, los cambios ocurren en meses o incluso días.

El inicio de la integración se basa en construir nuevos paradigmas que permitan ver y entender al ser humano en sus niveles energéticos, físico, químico, biológico, psicológico y social, y a la vez como un ser comunicador, creativo, interdisciplinario cognoscente y evolutivo. Estos principios integradores de ser y conocer constituyen los ejes de nuevos diseños curriculares que deben ser retomados en la docencia y en la formación humana, por tal razón, me atrevo a proponer que dentro de nuestra práctica educativa analicemos y reflexionemos sobre las aportaciones del estudio, en donde la distancia que existe entre la ciencia y la tecnología dentro de la escuela y fuera de ella, de los obstáculos que existen para su aprendizaje, pero sobre todo las metodologías tradicionales y alternativas que presenta los avances docentes en la selección y organización de los contenidos, y es por eso que se relacionan con la finalidad del proyecto ya que todos estos conocimientos se integran con el uso de la Tecnología de la Comunicación y la Información (TIC´S).

Esto se puede generar en base a los conocimientos que en cada asignatura se van adquiriendo en el proceso enseñanza-aprendizaje, para que en el trayecto formativo se apliquen en la práctica educativa y personal, como una necesidad de las actividades que se van generando y adquiriendo en esta época de avances tecnológicos.